Pensamiento

Fiestas mayas

Cada mayo que transcurre nos sentimos un poco patriotas. Un poco más de lo habitual. Cada mayo que transcurre nos sacamos el sombrero ante Manuel Belgrano, patriota si los hubo y si los hay, y repetimos como una jaculatoria sus palabras "Ay, Patria mía". O, como sostienen otras fuentes, "Pobre Patria mía". Para el caso, es lo mismo.
En el fondo mayo es, o debería ser, una fiesta en tanto y en cuanto en ese mes de 1810 el futuro pueblo argentino se animó a dar sus primeros pasos hacia la idea de libertad.
Y City Bell, con raíces bien insertas en esta Pampa, tiene la coincidencia de que su acta de nacimiento se firmara también en un mes de mayo, 104 años después que aquella revolución.

Y a pesar de los muchos "Ay, City Bell mío" que tenemos para decir, nos gusta que se vista de fiesta. Que haya muestras, degustaciones, actos variados con motivo de recordar que el 10 de mayo cumple años nuestro pueblo.
La ocasión es buena y propicia para pensar hacia delante y darse cuenta de que en dos años festejaremos su centenario. Estamos invitados a ser protagonistas. A preparar la pilcha dominguera, entonces, porque será una gran fiesta. La nuestra.

(mayo 2012).